11/26/2015

Volver a creer, volver a caer.

Pasé 2 días, con aquella sensación en el estómago, que se escondía tras los síntomas normales de una gastritis. Había olvidado que las náuseas son el reflejo del mal.estar, y que mal estares hay más de uno, muchos en este mundo. Siempre he sabido que sobre mí reina la emoción, y el cuerpo no era excepción, como para soportar ese nudo en el pecho, lo hizo real. Van dos días de sentirme derrotada, y no lo estoy, de bajar la mirada y entrar en ese círculo de negación, en el que no paro de girar y girar. Perdono las veces que mi corazón me lo permite, y mi cuerpo no me lo agradece, desfallece ante lo cruel de lo real, que hay personas que son lo que son, y que nada va a cambiar. Quiero creer infinitamente que el mundo está lleno de posibilidades, y vacío de certezas. Y si es ese mi error, ser la más ilusa, moriré por serlo, por creerme que nada está escrito, y que todo puede volcarse al final.

11/17/2015

El peor de todos, el no sentir.

Qué es la decepción sino ese sin sabor en la punta de la lengua, esa incapacidad de sentir siquiera orgullo, alivio, felicidad ajena. Y cuántas veces tuviste que equivocarte para desatar tal insensibilidad en el otro. Para volverte invisible, nulo ante sus ojos que antes brillaban por vos. Cuántas veces la cagaste para acabar con tanto amor, y que bien lo hiciste. Peor aún, que poco te importa, y qué tan merecido te lo tienes. Tan merecido y tan poco merecido que uno pueda siquiera sentir algo por vos. Me has vuelto incapaz de corresponderte una sonrisa o el saludo, incapaz de sentir empatía. Te has deshumanizado al punto en que simplemente no eres nada, o peor, eres como cualquiera. Me has cegado lo ojos, o más bien quitado la venda, y ahora ni siquiera puedo verte cómo eres, porque solo veo, lo que eras. Decepción es este sentimiento por el que no sientes nada más que una profunda falta, y carencia, de algo que al final ni se cree que existió. Que tanto hiciste o más bien no, para que yo pudiera no sentir ya más por vos.

11/04/2015

Una tarde en BCN

Comienzo a escribir tomándome un chocolate caliente frente a la pantalla. Llegó el invierno, pasó navidad, y la soledad increíblemente ya no me molesta. La he aprendido a querer, y en parte es porque este momento de aceptarme y vivir conmigo misma me ha hecho crecer. Cuando regrese, seguiré siendo yo, pero con mucho más para dar y menos ansias de recibir de los demás. Porque al final, y eso lo entiendes cuando estás lejos, solo, y te toca comenzar de nuevo, uno solo se tiene a uno mismo. Quedarme un viernes en casa, no es una tortura, como me lo parecía antes. Si algo me ha dado realmente duro de esta experiencia es darme cuenta que soy la misma, sin importar el lugar, y mis errores siguen siendo los mismos, y mis tristezas. Pero también mis alegrías y mis motivos para sonreír aumentan. Se suman a mi vida nuevas experiencias, personas que están igual que yo: en la búsqueda.

10/05/2015

Irse es regresar.



Irse es regresar

Alejarse es ver de cerca

Todo lo de que cerca

Te hacía enceguecer

Amarse es olvidar

Recordar que olvidarse de uno mismo

No es amar.

Que es mejor enloquecer

Que ser cuerdo te ata

Y no te deja ser.

Hartarse es comenzar

Morir y festejar

Hacerle luto a todo aquello

Que se deja atrás.

La enseñanza es no aprender

Porque del ciclo no se escapa

A menos que decidas

No querer.

8/25/2015

Senzazioni (sin acciones) Sensaciones.


Ella sonríe, pero es una sonrisa alarmante aquella que se dibuja en su cara. Y desdibuja a su vez sus certezas aún sin comprobar. La atormenta sentirse feliz por razones que han perdido la razón. ¿Para qué? se pregunta refunfuñando entre dientes, mientras parpadea dos o tres veces para evitar que sus lamentos inunden los cañones de sus mejillas. Alcanzó a percibir en el aire una humedad repentina; le pasaba a menudo, eso de predecir el clima. Y entonces sacó su paraguas sabiendo que nuevos aires arrastran consigo también viejas tempestades.,

Se lo repetía una y mil veces. –No puedo, No puedo dejarme llevar- mientras caminaba contra la fría corriente, y su paraguas luchaba por no voltearse, como solía hacerlo cuando habían dudas. Titiritaba de frío, o de miedo. No creo que ella misma notara la diferencia.

8/20/2015

Ideas

Mi cabeza insiste, en negar lo que dice mi cuerpo. Y a veces el cuerpo me niega también lo que pienso. ¿¡Como diferenciar entre una idea fuerte, y una real¡? Entre una que influencia, ocupa, posee, arrebata voluntad. Y esa otra, aquella que es lo que es pero ignoras porque es pequeña, y se ve falsa en comparación. Como dejar de sonreír cuando me miras, o evitar mordisquearme el labio cuando pienso en los dos. Tan involuntaria es la verdad, que se me escapa por el cuerpo, es expulsada por mis poros, y me empapa las piernas. Arrebata esa razón, que miente por ser moral, ética, o demasiado coherente para un mundo tan loco. Mentirosa es la razón porque no creo que el cuerpo pueda siquiera disimular una caricia.


3/09/2015

Reflexiones personales

Correr, escapar, no voltear a mirar atrás. Dejar, Soltar, avanzar, tropezar y volverse a levantar. Puedes huir pero no esconderte. Al menos no de ti, no de tus culpas, tus penas, tus defectos. Cuando escapas no estás solo, estás contigo mismo y muy pocas veces han estado tan a solas. Mucho tiempo para hablar, recriminarse, pelear. Pero también para amarse y darse cosas, conocerse mejor, evolucionar, corregir, perfeccionar sin abusar. Llega ese momento en que te sientes feliz y tranquilo: Solo. Y aun así, no es suficiente. Sigues extrañando a tus amigos, tu familia, tu perro. El otro. Porque ¿de qué te sirve ser una mejor persona, sino puedes compartirlo? Hablo por mí cuando digo esto, y es que no tiene sentido una vida en la que te ames a ti mismo solamente. Eventualmente ¿qué vas a hacer con tanto amor reciclado y reutilizado en ti mismo? Sería como respirar el mismo aire siempre, y terminaría por volverse tóxico para el alma. El ser humano está hecho para dar, y por eso los egoístas por más que se lo crean no son felices. Yo, yo, y yo. Es una premisa incongruente en un mundo donde hay más personas, donde vienes de otro, naces con otro, o das a luz a otro. El yo absoluto solo podría funcionar en la tumba, porque ni en el vientre. La naturaleza se las arregla para desmentir aquella frase, de que solos llegamos y solo nos vamos. Por mi parte llegue con otro, ¿cómo puedo querer una vida sola, si siempre estuve acompañada?. Como no desear envejecer con otro, tener hijos, que me den nietos. Esta soy yo, a la antigua, si les parece. Pero sé que por más que haya logrado o logre encontrarme, estando lejos, siempre voy a necesitar de ellos. ¿No se necesita de otro para ser feliz? No solo lo necesitas, lo deseas, no en vano es ese el ciclo de la vida. Respeto su posición de querer vivir, y morir solos, de saltarse eso de la reproducción. Pero no se las den de evolucionados, que al fin y al cabo, el egoísta por obvias razones tiende a desaparecer de este mundo.


MaL

1/06/2015

Nuevas Letras

Me encanta no saber el color de tus ojos, más extraño aún, voltear a mirarte y sentir que debo tomar esa ola, ese riesgo. Aún sin saber hacerlo, aún sin saber a dónde puede llevarme. Lo único que me interesa sentir ahora, es vida. Me avergüenzo cuando me delata la sonrisa y estás mirándome los labios queriendo besarme. ¿De qué color son? no lo sé y ¡a quién le interesa! Solo sé que me pierdo en ellos cuando intento descifrarlos, que son fríos como el ártico, pero vos ardés. ¿O soy yo? O más bien son grises como los días de invierno, perfectos para quedarse en cama intentando besarte con los ojos cerrados, o que me beses, ¿yo que sé? O podría simplemente dejar de mirarte… ¿de que me perdería que no haya ganado ya, al conocerte?